Este jueves inicia una nueva jornada por las Eliminatorias a la Copa del Mundo de Qatar 2022. La Selección Argentina visitará a Chile en la altura de Calama. El plantel de Scaloni, sin su DT, que se quedó en el país tras dar positivo para COVID-19, arribó en la noche del miércoles a la ciudad del norte chileno.
Pero el primer partido de la fecha clasificatoria es el que jugarán las selecciones de Ecuador y Brasil, en Quito. Allí, los dirigidos por el entrenador argentino Gustavo Alfaro buscarán su lugar en el próximo Mundial. Si bien el elenco ecuatoriano está cerca de conseguir su cupo, depende de otros resultados para asegurarse la clasificación hoy mismo y, además, atraviesa un momento complicado dentro del plantel.
Debido a la falta de ritmo competitivo de gran parte de sus jugadores, que se desempeñan en el fútbol local, recién comenzando la temporada, el partido frente a los de Tité es un gran desafío para el equipo de Alfaro, que marcha en el tercer puesto de la tabla de clasificación.
Por otro lado, el plantel se vio muy afectado por varios contagios y contactos estrechos de coronavirus durante el último mes, tanto entre los jugadores como dentro del cuerpo técnico. A raíz de esto, Alfaro no cuenta con todos sus componentes para el duelo frente a los brasileños.
Durante una conferencia de prensa virtual, el ex director técnico de Boca Juniors, declaró: «Es un momento difícil para Ecuador porque un porcentaje importante del plantel que nosotros tenemos está sin competencia. En el plano local no ha empezado la competencia (…) En el caso de Brasil tiene a todos los jugadores prácticamente con rodaje«.
Ecuador, ubicado en tercer lugar con 27 puntos, debutó en el Mundial de Corea-Japón en 2002. Luego de esa primera aparicion mundialista, La Tri participó en las ediciones de Alemania 2006 y Brasil 2014. «Nosotros tenemos un pie afuera del Mundial, no un pie en el próximo Mundial. No sirve de nada tener un pie puesto adentro si no se tiene el segundo«, fue la sentencia del técnico.
Hace unos dias, el COE (Comité de Operaciones de Emergencia de Ecuador) determinó que el partido se lleve a cabo a puertas cerradas. Esta decisión se tomó, en su momento, respondiendo al incremento de casos de coronavirus en aquel país. Pero luego de un pedido especial, se revisó la medida y se permitió un aforo del 50% en el estadio Rodrigo Paz Delgado, de la capital ecuatoriana.