El encuentro estaba parejo, pero una expulsión cambió el curso en el Nuevo Gasómetro en un clásico caliente. San Lorenzo consiguió un empate agónico frente a Huracán por la séptima fecha de la Copa de la Liga Profesional y sostuvo una racha de 22 años sin perder de local.
El equipo de Rubén Insúa no había tenido su mejor performance, de hecho también podría haberse encontrado en desventaja previamente, pero también tuvo sus chances para romper la paridad y no las aprovechó. Sin embargo, la roja a Gastón Hernández impactó fuerte.
En un trámite con polémicas desde el inicio, el árbitro había sancionado penal para el local por una mano de Lucas Souto dentro del área tras un centro de Nahuel Barrios. Y en medio de discusiones, luego de observar las imágenes en el VAR, anuló su primera decisión.
Ya con el balón en su poder, el Globo casi abre el juego con un fuerte disparo de derecha de Matías Cóccaro que se estrelló en el travesaño y picó del lado de afuera de la línea, por lo que se quedó con las ganas de festejar el primero ante la mirada de Ruud van Nistelrooy.
En la respuesta, Adam Bareiro desperdició también una chance para el Santo con un mano a mano en el que no pudo con Lucas Chaves. Con un ida y vuelta constante, sin muchas ideas, ninguno pudo convertir y se marcharon al descanso con el empate sin goles.
Luego, ya en el complemento, los cambios parecieron darle resultado a Insúa. El ingresado Iván Leguizamón se animó con un disparo de media distancia que el arquero rechazó al saque de esquina sobre el ángulo superior izquierdo para evitar el primero de San Lorenzo.
Pero una desatención en defensa dejó expuesto a Hernández, quien ya tenía amarilla y bajó a Walter Mazzantti sobre el borde del área, por lo que le costó otra amonestación y la tarjeta roja. A partir de allí, los dirigidos por Diego Martínez fueron en busca del premio mayor.
Precisamente, luego de un rechazo y varios rebotes afuera del área, la pelota cayó en los pies de Ignacio Pussetto, que no perdonó con una soberbia definición de zurda que se clavó en el ángulo derecho del arco de Augusto Batalla, que solo acompañó el remate con la mirada.
Al local no le quedó más alternativa que salir a emparejar las acciones nuevamente, y si bien se descuidó por demás atrás y pudo haber sufrido un segundo gol, casi pone la igualdad con un centro de Bareiro desde la izquierda que Leguizamón desvió, pero no pudo acertar al arco.
Y en tiempo adicionado, Gastón Ramírez recibió una fuerte infracción en el área después de que la defensa del conjunto de Parque Patricios no despejara la pelota y el juez no dudó en cobrar penal. Bareiro se encargó de cambiarlo por gol con una sutileza de derecha.
Nuevamente, el descontrol se apropió del juego y San Lorenzo aguantó como pudo para quedarse con un punto clave para el futuro. Su próximo compromiso será nuevamente de local frente a Newell’s, mientras que Huracán será visitante de Rosario Central.
Foto: @CAHuracan
