De cara a la reanudación del Campeonato Nacional tras la interrupción por las Eliminatorias Sudamericanas, en las últimas horas se conoció un castigo para Universidad Católica: deberá jugar un partido a puertas cerradas por los incidentes en el partido con Ñublense.
Con la necesidad por mejorar su presente y acomodarse dentro de los puestos de pelea por clasificación a las competencias internacionales, ahora tendrán que afrontar un compromiso sin público según lo determinó la primera sala del Tribunal de Disciplina de la ANFP.
El 26 de agosto, en el encuentro correspondiente a la 22° fecha, los barras del Cruzado provocaron la suspensión momentánea del trámite durante 10 minutos debido al lanzamiento de fuegos artificiales al interior del campo de juego cuando su equipo ganaba 2-0.
Por ese motivo, emitieron un comunicado que explica la sanción que recibirán en Santa Laura. “Aplíquese al Club Universidad Católica la sanción de jugar un partido oficial en que le corresponda actuar en calidad de local, a puertas cerradas”, indica el documento de la ANFP.
A su vez, el mismo añade: “La referida sanción deberá ser cumplida en el próximo partido del Torneo Nacional que con posterioridad a la fecha que la presente sentencia sea notificada, le corresponda intervenir al club Universidad Católica en calidad de local”.
Por esa razón, Católica tendrá que jugar sin público su compromiso correspondiente a la 24° fecha del Campeonato Nacional contra Magallanes programado para el domingo 24 de septiembre. Si bien la institución tiene la opción de apelar, respetarán la decisión.
Foto: @Cruzados