En el Estadio George Capwell de Guayaquil, Ecuador, la Selección Venezuela Sub-17 empató de forma agónica 1-1 ante la debutante Paraguay y mantiene vivas sus aspiraciones de meterse en el Hexagonal Final del Campeonato Sudamericano Sub-17.
Apenas 12 minutos de juego habían corrido en el cronómetro cuando el árbitro decidió suspender el encuentro por malas condiciones del terreno. Y es que la lluvia había hecho de las suyas durante gran parte del día y había charcos dentro de la cancha.
Fue poco más de una hora y media lo que el encuentro estuvo parado hasta que finalmente el césped logró drenar de manera natural bastante del agua que había dentro. Tras unos breves calentamientos por el tiempo de inactividad, un pique reanudó la acción.
En lo que se jugó, la Vinotinto fue mejor en cuanto al juego con buenas sociedades por pases que de todas formas no llegaron a concretar en el último tercio del campo rival con falta de eficacia también de cara a los tres palos.
Mientras tanto, la Albirroja aprovechó que el pasto pasó de estar imposible a la hora de la suspensión a más que jugable y rápido en la reanudación. Esto favoreció a los paraguayos en su juego de velocidad y transiciones rápidas.
En el mejor momento del conjunto venezolano, Paraguay se encontró con un penal de Ángel Borgo sobre Jorge Mora. De la pena máxima se hizo cargo Rodrigo Villalba con un remate fuerte al medio.
Cuando todo parecía perdido, sobre el final apareció David Martínez para tomar un rebote en la puerta del área grande y, tras acomodarse, se sacó un fuerte disparo de zurda para la agónica igualdad.
De esta manera, Venezuela, que en la próxima jornada se enfrentará a Bolivia, sumó apenas punto después de dos partidos jugados en el Sudamericano Sub-17 pero todavía sueña con su continuidad de cara al Hexagonal Final.
Foto: Albirroja