A pesar de la victoria por 2-1 en la visita a Stuttgart, que permitió a Bayern Munich mantenerse en el liderazgo de la Bundesliga, compartido con Borussia Dortmund, Julian Nagelsmann mantuvo un alto nivel de exigencia y se marcó tarea para el hogar.
El entrenador del conjunto bávaro sintió el apretado final del encuentro, en el que los Suabos estuvieron cerca de la igualdad, y apuntó a que su equipo mejore la eficacia, para evitar problemas en los partidos que están bajo su control.
"Después de ponernos 2-0, tuvimos varios contraataques que no terminamos bien. Teníamos el juego bajo control, pero si recibes goles tardíos, las cosas se ponen apretadas nuevamente", expresó, en conversación con Sky Sport, al término del juego.
"Tenemos que terminar mejor nuestras chances e ir por el tercer gol, ya que luego mataríamos el partido", continuó el técnico sobre una conquista que mantiene al cuadro rojo y el BVB en la cima del torneo, con 49 unidades.
Consultado por la revancha con Paris Saint-Germain, por los octavos de final de la UEFA Champions League, una serie en la que el Bayern ostenta la ventaja mínima, Nagelsmann prefirió no dar pistas en relación a la alineación, la que podría ser la misma que inició este sábado. "Tengo que analizar y ver cómo está el PSG, luego decidiré", dijo.
Otro de los que se paró ante los micrófonos tras el triunfo fue Leon Goretzka, quien comentó: "Cometimos algunos errores después de subir 2-0. El oponente no creía que pudieran sacar algo del juego después de bajar 2-0. Tenemos que actuar en consecuencia, pero no logramos hacer eso en los últimos 15 minutos".
Por su parte, Thomas Müller sentenció: "Estamos felices. Ganamos y estamos de nuevo a la cima de la tabla. Cuando el Bayern está allí, siempre tengo una buena sensación. El hecho de que el juego se puso apretado al final es, quizás, una buena prueba para el partido de Champions contra el PSG".
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