Amadeo Conrado Uberti, conocido como “El Gordo Hacker”, fue detenido en Argentina, acusado de haber secuestrado a un hombre durante tres horas, obligándole a hacer compras online.
Uberti, de 29 años, se dedicaba presuntamente al minado de criptomonedas. Ya había archivdo causas por estafas, hurto y tentativa de robo. En esta ocasión, fue acusado de “privación ilegítima de la libertad agravada”. Además, la policía detuvo a otro sujeto que se encontraba en el lugar y se están investigando sus antecedentes. Por otro lado, la víctima es un hombre de 35 años quien quedó traumatizado. Por ello, la fiscalía le puso custodia policial y le ofreció ingresar al Programa de Protección de Testigos.
La víctima declaró que todo comenzó una semana antes. Un conocido con el que suele jugar a la PlayStation de forma online, le presentó al “Gordo Hacker”. Uberti lo invitó a su hogar y le comentó que se dedicaba a “minar bitcoins. Sin embargo, le dijo que tenía “problemas judiciales”, por lo que necesitaba “un cadete con auto” para que le comprase las placas de video.
La víctima aceptó. A los pocos días el presunto agresor le dijo que ya formaba parte de su “corporación”. Cuando lo secuestró, Uberti le hizo dejar en la casa su billetera con documentos y lo mandó a comprar con otro joven “placas de video”. Como los comerciantes se negaron a venderles lo que necesitaban regresaron a la vivienda. Allí, bajo amenazas, el imputado le obligó a sentarse y a hacer compras online.
Cuando el presunto cómplice le contó al «Gordó Hacker» que la víctima había tratado de huir, le habría amenazada con un destornillador. Sin embargo, logró escapar durante un descuido por una ventana de cristal. Según las fuentes, en el procedimiento se desmanteló “laboratorio técnico” repleto de CPUs, discos rígidos, placas de video, monitores, memorias, notebooks, posnets, consolas PlayStation, pendrives y tarjetas de débito y crédito. Estas, de acuerdo a las sospechas y lo declarado por la víctima, podrían estar relacionados a maniobras fraudulentas con criptomonedas y clonación de tarjetas.
También se encontró dinero en efectivo, una máquina contadora de billetes, los guantes de trabajo y el destornillador con el que, según la denuncia, el imputado amenazó a la víctima durante su cautiverio.
El supuesto delincuente fue detenido y negó los hechos ante el fiscal.
