Desde su llegada a Independiente, la dirigencia le prometió refuerzos a Eduardo Domínguez. Debido a problemas de inhibiciones, esto se demoró más de la cuenta y recién en las últimas semanas pudo empezar a incorporar. El primero que se re-incorporó al Rojo fue el arquero Sebastián Sosa. Su préstamo en el conjunto de Avellaneda finalizó el 31 de diciembre pero, luego de desvincularse del Mazatlán de México, acordó quedarse en el equipo dirigido por El Barba.
El primer refuerzo que llegó fue Damián Batallini. El ex Argentinos Juniors firmó su vínculo a préstamo por un año con cargo y con opción de compra´de compra por 2 millones de dólares por el 50% de su ficha. El segundo fue Leandro Fernández. LLegó por un pedido expreso del técnico Eduardo Domínguez y comienza su tercer ciclo en Avellaneda. Y el tercero que se estaría cerrando en estas horas es Alex Vigo, el lateral izquierdo que no es tenido en cuenta por Marcelo Gallardo en River.
Y el cuarto refuerzo llegó este jueves. Se trata de otro caso similar al de Sebastián Sosa. Lucas Rodríguez terminó su vínculo con el club el 31 de diciembre y quedó libre. Pero ahora, habría llegado a un acuerdo con el Rojo para sumarse al conjunto dirigido por Eduardo Domínguez. El lateral izquierdo, un puesto que quería reforzar el DT, firmaría un contrato por productividad tras sus recurrentes lesiones musculares.
Antes de finalizar su contrato, desde su llegada en el 2020 Luquitas alcanzó a disputar 31 encuentros y anotó 1 gol entre el certamen doméstico y la Copa Sudamericana.
Hacia finales de diciembre, cuando su vínculo estaba por terminar, realizó una publicación de despedida en sus redes sociales donde escribía que «desde lo deportivo fue un año agridulce, no el deseado para mi, pero disfruté todos los días ser jugador de Independiente y disfrute cada momento fuera y dentro de la cancha ojalá siga siendo así».
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