Seis historias de lesiones sufridas por jugadores sin entrar a la cancha.
Las lesiones son moneda corriente en el fútbol de alto rendimiento. Al ser un deporte físico, de alto impacto y grandes velocidades, ver a un jugador sufrir una lesión durante los 90 minutos no es algo que nos sorprenda.
Pero algunas veces, las afecciones se dan sin que el jugador pise el campo de juego y, a veces a kilómetros de un estadio.
2001 – Río Ferdinand
En aquel momento jugador del Leeds de Inglaterra, Río Ferdinand sufrió una lesión… ¡mientras miraba la tele! Al haber estado en la misma posición durante algún tiempo, el defensor tuvo que levantarse a atender el teléfono y fue allí cuando se dio una distensión de ligamentos, que le llevó tres semanas de recuperación.
2006 – Darren Bent
Para celebrar la firma de su contrato por cuatro años con el Charlton Athletic F.C., el delantero británico organizó una cena especial en su casa. Cuando estaba cocinando, al cortar cebolla, se rebanó un dedo. El tajo seccionó varios tendones, dejando al jugador fuera de las canchas por seis semanas.
1995 – Carles Busquets
El accidente sucedió en la casa del arquero español, cuando su esposa estaba planchando ropa. El pequeño hijo Aitor, de cuatro años, quiso jugar con el cable de la plancha hasta que la tiró. Por suerte, el portero del Barcelona de aquel entonces estaba a su lado y con sus manos pudo evitar que el pesado y caliente artefacto cayera sobre la cabeza del niño. Busquets sufrió quemaduras de segundo grado y quedó afuera del siguiente encuentro del Barça.
2002 – Santiago Cañizares
El arquero había sido seleccionado como titular para el mundial de Corea-Japón. En la concentración de la selección, unos meses antes de la comptencia, el portero fue a ponerse un caro perfume, pero el frasco se le cayó y estalló en pedazos. Uno de los fragmentos de vidrio se enterro en su pie y le seccionó un tendón. Aunque fue operado, no llegó a tiempo y tuvo que ceder su puesto a Iker Casillas.
2002 – Julien Escudé
El defensor francés se rompió los ligamentos de la rodilla mientras paseaba a su perro.
1999 – Darren Barnard
Sufrió la misma lesión que Julien Escudé, pero el mediocampista británico resbaló al pisar un charco de pis de su perro quedando fuera del juego por cinco meses.